Para evaluar un paciente con sospecha de patología cardiaca o respiratoria es importante realizar un correcto protocolo diagnóstico. En primer lugar se debe realizar una completa anamnesis y examen físico para posteriormente continuar con las pruebas complementarias oportunas en función de cada paciente.
Exploración y examen físico
Mediante la anamnesis se deben recopilar datos de la reseña del paciente como edad, raza, sexo, antecedentes de enfermedades previas, resultados de las distintas pruebas realizadas, tratamientos administrados, dosis y respuesta a los mismos, vacunas, historia familiar, cirugías, etc. Se debe realizar una exploración física completa. La auscultación cardiaca exige seguir una técnica ordenada y sistemática. Se deben auscultar los cuatros focos valvulares cardiacos.
Radiología cardiaca
Desde el punto de vista cardiológico una buena radiografía permite valorar la presencia de:
- anomalías en la posición, el tamaño y la silueta cardiaca.
- identificar signos de insuficiencia cardiaca.
- evidenciar patologías torácicas extracardiacas que puedan estar relacionadas con el cuadro clínico que presenta nuestro paciente (patologías de mediastino, pleura o pulmonares)
Aunque el examen radiográfico es fundamental en cardiología, hay que tener en cuenta que debe analizarse como una parte de todo un protocolo para llegar a un diagnóstico preciso. No hay que olvidar que perros con patologías cardiacas como arritmias, degeneraciones valvulares, malformaciones congénitas,… pueden tener radiografías torácicas totalmente normales. Igualmente variaciones de lo que se podría considerar normal pueden corresponder simplemente a variaciones anatómicas de la raza, a la fase del ciclo respiratorio o cardiaco, o a los parámetros con los que se ha realizado la radiografía.
Electrocardiograma
La electrocardiografía consiste en el registro y estudio de la actividad eléctrica generada por el corazón a través de la colocación de cuatro electrodos cutáneos que transmiten la información eléctrica hasta el electrocardiógrafo. Este registro se denomina electrocardiograma.
Ecocardiografía
La ecocardiografía es una técnica de diagnóstico muy valiosa pues nos permite evaluar lesiones valvulares, el tamaño de las cámaras cardiacas, la función miocárdica, la presencia de efusiones pericárdicas y diagnosticar las distintas cardiopatías congénitas. Para poder realizar un buen estudio ecocardiográfico suele ser necesario rasurar por ambos lados la zona donde se note con mayor intensidad el latido cardiaco. También hay que afeitar una pequeña porción de pelo caudalmente a la última costilla cerca de la zona ventral por el lado izquierdo. En algunos casos se puede evitar usar la peladora humedeciendo el pelo con agua y jabón. Para realizar un completo estudio ecocardiográfico, a menudo es necesario dejar al paciente ingresado durante varias horas ya que en ocasiones es mejor ir haciendo pausas en el proceso de obtención de imágenes.
Registro Holter de 24 horas
El Holter, o también llamado sistema de electrocardiografía ambulatoria, consiste en un dispositivo portátil no invasivo que registra la actividad eléctrica cardiaca de forma continua durante 24-48 horas. Es una herramienta muy útil que permite superar ciertas limitaciones del electrocardiógrafo ya que el ECG que podemos realizar durante un periodo de 5 minutos no es representativo de la actividad eléctrica del corazón de todo el día pues las arritmias pueden surgir de forma intermitente en cualquier momento.
Fluoroscopia
La fluoroscopia es una técnica de imagen que permite obtener imágenes en tiempo real de las estructuras internas del paciente. Este tipo de equipamiento resulta imprescindible si se quieren realizar técnicas de diagnóstico y tratamiento más avanzadas como angiocardiografías, oclusión de ductus mediante ACDO, valvuloplastias, o implantación de marcapasos.