Hemodiálisis

• Los pacientes serán valorados médicamente y si son candidatos para la realización de la terapia
• Se les colocará un catéter a nivel de la vena yugular.
• Este catéter podrá ser utilizado en varios tratamientos. Es por ello, que se recomienda que las yugulares de los pacientes referidos se mantengan lo más integras posible.
• Durante el proceso, la máquina bombeará sangre a través del sistema y de su riñón artificial. El proceso no es doloroso y normalmente no se requiere anestesiar al animal durante el procedimiento.
• El paciente se mantendrá hospitalizado mientras dure el tratamiento.
• El número de sesiones necesarias dependerá de la patología de base y de la evolución del paciente.

El pronóstico para la recuperación de la lesión renal aguda depende de factores que incluyen: la etiología, la gravedad de la lesión, el número de órganos afectados, las comorbilidades del paciente y las complicaciones secundarias. En un metaanálisis de perros y gatos con lesiones agudas, la mortalidad global agrupada para perros que recibieron hemodiálisis fue del 51,0% y para los gatos del 54,1%. Como factor pronóstico favorable se describía la presencia de una patología infecciosa como desencadenante. En cambio, la falta de conversión de anuria u oliguria a un estado no oligúrico se asoció con un peor pronóstico.

No respuesta al tratamiento médico inicial de la lesión renal aguda:

• Azotemia y/o uremias graves o progresivas.
• Hiperpotasemia grave que no responde al manejo médico.
• Alteraciones del ácido-base
• Estabilización previa a cirugía en pacientes felinos con obstrucciones ureterales.

• Sobrecarga de fluidos (especialmente cuando haya oligo/anuria presente).
• Eliminación de ciertas toxinas externas de pequeño tamaño (Por ejemplo: etilenglicol, metaldehído, paracetamol y ciertos antiinflamatorios como el ibuprofeno).
• Corrección de sobredosis con ciertas medicaciones (Por ejemplo: fenobarbital, algunos antibióticos y algunos quimioterapéuticos)